Descripción
Mariano Otero impregna con sus esclarecedoras ideas y su visión totalizadora de la sociedad mexicana de la primera mitad del siglo XIX el devenir histórico de México. Fue un mexicano de tiempo completo, porque todo el tiempo de su corta existencia se lo dedicó a México. Si su pasión era la legislación, no vaciló en sentar las bases de lo que debía ser la Constitución y en ser el precursor de los derechos humanos y sus garantías, dejándolos como prototipo de su defensa el Juicio de Amparo.